El Anulum Piscatoris (Anillo del Pescador),
que en otro tiempo fue típicamente ilustrativo-definitorio del Vicario de
Cristo, el sello de su Autoridad y de su Reinado, ha desaparecido del mapa, y
solamente se encuentra en su dedo correspondiente en ocasiones muy especiales.
Parece ser que se quiere transmitir
la idea de que en esta evaporación
se incluye también todo lo que el susodicho anillo representa, especialmente el
Primado de Pedro.
Es sabido que todos los sucesores de San
Pedro en la Sede de Roma y por tanto en el Sumo Pontificado de toda la
Cristiandad, han ostentado siempre esta Primacía, dada directamente por Cristo
a Pedro y sus sucesores. Ahora quieren hacer una cuchipanda episcopal entre
todos los aspirantes que desde siglos andan cabreadetes con el tema, una
especie de club de los Cinco como si fuera todo lo mismo. Y desde luego,
Francisco está encantado con ello. Ya se viene buscando desde hace años -aunque
de una forma menos descarada-, lo que Juan Pablo II y Benedicto XVI llamaron
una nueva
forma de entender el Primado, y que Francisco acaba de corroborar: lo que
dicho en cristiano quiere decir una nueva forma de cargase lo que ha
constituido desde siempre la Supremacía del Obispo de Roma, y que tanta sangre
ha costado a la Iglesia, amén de un Cisma monumental. Eran otros tiempos, dicen
ellos.
Hoy día, con una Iglesia que se emboba con la
democracia, que abomina de lo jerárquico y que se avergüenza de su propia
Autoridad, el Primado de Pedro no deja de ser un contrasentido. Por eso los
exegetas se han cuidado mucho de decir que el texto en que Jesús entrega a San
Pedro el poder de atar y desatar, es tardío, insulso, falso, inventado y
molesto. Ya saben ustedes la tendencia de los exegetas modernos a eliminar lo
que no interesa y llegar a las mismas palabras de Cristo que no son otras que
las aceptadas por los gurús de la Teología. Que me gustan, pues estupendo: son
auténticas. Que no me gustan, pues entonces son añadidos de copistas carcas
medievales.
El caso es que el dichoso anillo aparece y
desaparece como si fuera por arte de magia. Nada por aquí, nada por allí. Ahora
sí, ahora no. Soy el Obispo de Roma, soy el Sumo Pontífice. Mando, pero no
mando. El ecumenista que ecumenice, buen ecumenizador será. Como la Cruz
Pectoral que se desliza suavemente para esconderse en el fajín cuando los
judíos están delante. ¡¡Qué cosas!!
El mensaje viene a completar tantas otras
costumbres y ritos que van desapareciendo porque son signo de riqueza, de
poder, de principado temporal y de molestia tradicionalista. Desapareció en el
primer minuto la muceta, el estolón papal, desaparecieron los famosos zapatos
rojos, las casullas elegantes, desapareció la riqueza litúrgica, las
recepciones con estilo. Y como una cosa que desaparece debe ser sustituida por
otra, aparecieron los zapatos vulgares, las casullas cutres, los cálices
lampedusa, la sotana blanca transparentando pantalones negros…. ¡¡¡Uf!!!… y por
supuesto la cartera de mano modelo viaje pontificio, con ribetes bien sobados
para dar muestras de pobreza.
Pero lo que no me podría sospechar es que
apareciera la pulsera modelo color-gay, tipo adolescente rebelde y con ligeros
toques new-age . Ya se sabe que estas pulseritas son una monada y que se
encuentran por doquier. Las hay también que llevan añadidos ciertos aditamentos
de brujería medicinal que quitan el reúma o que disminuyen la artrosis
espiritual. Todo muy mono y revelador de lo que tenemos y padecemos.
Por eso propongo que se la llame la pulsera del pescador, para que de
ese modo se pueda recuperar algo de las antiguas tradiciones. Seguro que pronto
descubrirán algunos, que San Pedro llevaba algún brazalete o esclava que le
diera suerte en sus viajes y que le había regalado su suegra después de la
curación de las fiebres.
Hay dos intervenciones papales recientes que
ilustran la situación muy bien.
Ante la Renovación
Carismática, Francisco dice con soltura que
no hay que enjaular al Espíritu Santo (expresión casi de chiste de barrio
bajo), se supone que porque el Espíritu es libre y todos cabemos en la Iglesia.
Ya se dijo en otra ocasión que en la Iglesia cada carisma representa una acción
del Espíritu. Claro que no se aplica esto a ciertos carismas que no acaban de
gustar. A esos se les conmina a ponerse
al día y abandonar sus costumbres preconciliares o si no, ¡puerta! Ya lo
han hecho con los Franciscanos de la Inmaculada los dos mafiosos (con perdón)
que están dirigiendo la Congregación correspondiente. Y vienen más por ahí
cerca.
San Pablo (que era mucho más fino y además
escribía por inspiración), llegó a decir: No extingais el Espíritu. Pero aquí
se extingue al Espíritu que no es el que nos gusta, y se enjaula a los
Franciscanos de la Inmaculada. O a quien se ponga por delante.
Así que Francisco tuvo que aclarar que la
definición de piedad, no
es un mero tener lástima de alguien, sino amar de verdad al prójimo. Pues
por lo visto, no se tiene lástima de nadie siempre que sea amante de la
tradición o sospechosos de herejía preconciliar (que hoy es la verdadera
herejía). Y tampoco se le concede la más mínima dosis de misericordia.
Me temo que esto va en aumento. Y la pulsera
del pescador, tiene más poder del que parece. Una
pulsera para dominarlos a todos, como en el relato de Tolkien.
Visto
en: http://tradiciondigital.es/
Nacionalismo Católico San Juan Bautista
De acuerdo a esa fotografía con la pulsera gay, ¿veremos a Bergoglio pronto con ARITOS? Me pregunto.
ResponderBorrarFrancisco trabaja para el lobby gay
ResponderBorrarPrimero encubre a Monseñor Ricca y al poco tiempo de ser elegido habla como si conociera el caso de Ricca a fondo y desmiente las evidencias para limpiar su imagen sin embargo le llama a este sacerdote un gay que busca de Dios y luego lo asciende al cuidado de la Banca del Vaticano, Francisco se hospeda en un hotel manejado por el lobby gay, Francisco pone la Banca del Vaticano en mano de multinacionales del lobby gay, Francisco se inclina y le besa la mano a un cura promotor de la homosexualidad y concelebra con el. Jorge Bergoglio autorizó el falso Bautismo de los mellizos comprados por el travesti Flor de la V y su pareja homosexual, Francisco no defendió el sacrilegio cometido por las lesbianas en la Catedral de Argentina, la mayoría de los nuevos obispos, cardenales que ha ordenado Francisco son promotores de la homosexualidad, Kasper tiene la bandera gay en su pagina Web, a Francisco lo eligen las revistas gay para poner su foto en la carátula, etc , etc, etc
¡Misericordia!
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