27/03/2017
« Proferirá
palabras contra el Altísimo y pondrá a prueba a los santos » (Dn 7, 22)
Original:
« In the meeting, the pope jokingly likened this to the way the Holy
Trinity functions. “Inside the Holy Trinity they’re all arguing behind
closed doors”, Cuda says Francis told them, “but on the outside they
give the picture of unity.” »
Traducción:
« En la reunión, el papa, bromeando, comparó esto con la manera en la cual
funciona la Santísima Trinidad. ‘‘Dentro de la Santísima Trinidad, ellos se
la pasan discutiendo a puertas cerradas’’, Cuda cuenta que Francisco les
dijo, ‘‘pero exteriormente dan una imagen de unidad’’. »
Bergoglio,
además de tomar el Santo Nombre de Dios en vano, infringiendo el segundo
mandamiento, blasfema de un modo espeluznante al introducir en el seno del Dios
Uno y Trino la discordia y el engaño. No hace falta ser muy versado en
teología para comprender que ésos son precisamente los atributos del diablo,
quien es el « padre de la mentira » (Jn 8, 44), cuyo nombre
significa, etimológicamente, el divisor, el que separa y crea discordia. Por lo
cual queda claro a quien sirve este individuo infame y bajo la influencia de
quien vomita sus horrendas blasfemias a repetición. Ya es sobradamente hora de
que este hombre sea denunciado públicamente por lo que realmente es: un impío
sin par, un blasfemador inveterado y un hereje notorio desprovisto de todo
temor de Dios...
Declaración solemne: Por esta
insigne impiedad, y por otra infinidad de fechorías semejantes, yo acuso a
Jorge Mario Bergoglio, falso profeta Francisco, vicario de Satanás y precursor
del Anticristo, de ser un blasfemador, un hereje y un apóstata, un enemigo
encarnizado de Dios, de la Iglesia y de la salvación de las almas. Usurpador del
trono petrino, este hombre impío y de una malicia e insensatez a toda prueba se
escuda detrás del prestigio que le confiere su presunto carácter pontifical y
utiliza diabólicamente y sin escrúpulo alguno la cátedra de San Pedro para
engañar desvergonzadamente a los católicos, proponiéndoles un sucedáneo del
Evangelio, una adulteración monstruosa del cristianismo, vaciándolo de su
contenido y reemplazándolo por la religión naturalista y humanista de la
masonería. Es un deber impostergable e ineludible, para todo católico que se
precie de tal, el denunciar, combatir y desenmascarar públicamente a este miserable impostor,
esbirro esmerado de las legiones infernales, cuya impiedad notoria
manifiestamente no cesará hasta que haya sido arrojado vivo al estanque de
fuego y azufre, que el Dios tres veces Santo tiene reservado para Satanás,
Príncipe de este mundo y Padre de la mentira, para los otros ángeles caídos y
para la cohorte innumerable de sus perversos secuaces aquí en la tierra,
operarios diligentes de toda forma de iniquidad, cuyo más conspicuo
representante es el Soberano Blasfemador del Vaticano, Jorge Mario
Bergoglio.
Nacionalismo
Católico San Juan Bautista
Mas que claro que este payaso no es el Vicario de Cristo.
ResponderBorrarHace 500 años no estuvieran debatiendo si es o no es papa. Estuvieran peleando quien prendería fuego a las estacas.
Lo más inquietante es que pase por serlo. Señal de la Gran Apostasía: no, no es un payaso, sino un siervo del Anticristo. Sabe muy bien lo que hace.
BorrarAmen
ResponderBorrar¿Qué más se puede decir si este señor ya lo ha dicho todo? Queda preguntarse si es que no hay ningún Pablo para corregir a este Pedro. Y qué es lo que tenemos que hacer los simples fieles, los peones de este ajedrez descabezado.
ResponderBorrarNo es ningún Pedro entiende es el Vicario de Lucifer.
BorrarNo es Pedro.
BorrarComo dijo San Atanasio:
"¡Que Dios os consuele! …lo que tanto os entristece es que los enemigos han ocupado por violencia vuestros templos, en tanto que vosotros, en todo este tiempo, os encontráis afuera. Es un hecho, que ellos tienen los edificios, los templos; pero, en cambio, vosotros tenéis la fe apostólica. Ellos han podido quedarse con nuestros templos, pero están fuera de la verdadera fe. Vosotros tenéis que permanecer fuera de los lugares del culto, pero permanecéis, en cambio, dentro de la fe.
Reflexionemos: ¿qué es más importante, el lugar o la fe? Evidentemente, la verdadera Fe. En esta lucha, ¿quién ha perdido, quién ha ganado: el que ha guardado el lugar o el que ha guardado la fe?
El lugar, es verdad, es bueno, (pero) cuando se predica en él la fe apostólica; es santo, si todo lo que sucede y pasa en él es santo.
Sois vosotros afortunados, porque permanecéis en la Iglesia por vuestra fe, que ha llegado a vosotros por la Tradición apostólica y si, sometidos a la presión, un celo execrable ha pretendido quebrantar vuestra fe, esa presión no ha tenido éxito. Son ellos los que se han separado, en la crisis presente de la Iglesia.
Nadie prevalecerá jamás contra vuestra fe, hermanos carísimos. Y nosotros sabemos que Dios nos devolverá un día nuestros templos.
Así, pues, mientras más se empeñen en quitarnos nuestros lugares de culto, más se separarán de la Iglesia. Pretenden representar a la Iglesia, cuando en realidad ellos se han expulsado a sí mismos de ella y se han extraviado."
(Coll. selecta SS. Eclesiæ Patrum, Caillau et Guillou, t. 32, p. 411-412).
La Iglesia verdadera actualmente está en la catacumbas. No en Roma.
Que horror y pocos lo ven!!!! Gracias por él articulo. Muy bueno, como siempre
ResponderBorrarPero entonces, ¿dónde se le puede dar verdadero culto a Dios? Porque es necesario hacerlo también públicamente.
ResponderBorrarNecesario hacerlo públicamente? No es así.
BorrarVerdadero culto a Dio es como ya sabemos, en la Iglesia. Para empezar, busquen sacerdotes verdaderos: Que sean válidamente ordenados, por medio del rito tradicional por medio de un obispo válidamente consagrado, que en su vez solamente oficie la misa de San Pio V. El rito de ordenación cambió en 1968. En el peor de los casos, son inválidos los sacerdotes ordenados en ese rito, en el mejor de los casos, son dudosos. Materia, forma e intención son los tres requisitos para que se lleve a cabo un sacramento. Los sacramentos de bautismo y matrimonio, hasta en las sectas protestantes pueden ser validos. Pero los otros cinco, solamente en la Católica.
Y para que arriesgarse ir a una "misa" con el sacramento dudoso?
La Iglesia suple en cuestión de sacramentos como la confesión. Pero la Iglesia no suple en el Sacramento de la Comunión. O es o no es.
Hay muchos sacerdotes validos y ordenados por obispos validos (Hay sucesión apostólica). claro la secta del Novus Ordo los tienen como "ex-comulgados" porque no apostataron y celebran el Novus ordo.
El mayor numero de Sacerdotes católicos verdaderos en el mundo están en México. Pero los encuentran en todos los países. Búsquenlos.
Si por gracias de Dios contamos con una capilla o iglesia donde se celebre la Santa Misa Tradicional, solo allí debemos estar. Y si no la hay, honestamente no se que haría. Personalmente solo asisto a la Misa Tradicional.
ResponderBorrarVendran tiempos en que los verdaderos adoradores, adoraran en Espiritu y en verdad....
ResponderBorrarEl error de San Pedro al que se refiere el comentario de María era una falta debida al respeto humano, no a una voluntad de destruir los fundamentos de la doctrina, del culto y de la moral de la Iglesia, que es lo que sucede con Bergoglio y con sus antecesores conciliares. La Iglesia se funda sobre la roca que es Pedro; si ella fuese defectible, también lo sería la Iglesia. Por ende, ningún papa legítimo puede arrastrar a la Iglesia hacia el error y la herejía, lo cual es el caso de los papas desde Roncalli en adelante (falsa libertad religiosa, falso ecumenismo, apoyo a la ONU, a la Democracia Liberal y a los Derechos Humanos masónicos, etc.)
ResponderBorrarAhora bien esto me lleva a evocar el famoso « katejon » de San Pablo en 2 Tes. 2, 6-7, el obstáculo que ha de ser removido para que pueda manifestarse el Anticristo, y que es el poder espiritual romano, es decir, el papado; sin papa legítimo, el carisma de enseñar infaliblemente la verdad a todo el orbe desaparece, y surgen entonces pseudo-papas que, escudados en su inmenso prestigio pontifical, crean un magisterio del error, para pervertir las inteligencias y allanar el camino del Ánomos.
Al respecto, Nuestro Señor nos advirtió claramente sobre la aparición de falsos Cristos durante los últimos tiempos, justo antes de su Parusía, y nos dijo que el poder del engaño en estos tiempo sería tal que, de ser posible, incluso los elegidos sucumbirían ante él, y esto es exactamente lo que ocurre desde el cónclave en el cual fue electo muy sospechosamente Roncalli (cf. el episodio del humo blanco durante largos minutos, la radio vaticana que dice « ¡hay un nuevo papa »!, y luego sale humo negro nuevamente...)
Por lo tanto, la Iglesia vive su Pasión mística desde JXXIII y, sobre todo, desde el CVII, cuando el Cuerpo Místico de Nuestro Señor fue entregado a sus enemigos para que hicieran con él lo que quisiesen. Quedan por venir su muerte y su posterior gloriosa resurrección, a imitación de su divino fundador. En efecto, es un hecho comprobable históricamente que la traición modernista operada por el CVII da inicio a la pasion mística de la Iglesia, siendo desde entonces sistémáticamente desfigurada por los anticristos que se han hecho con los puestos de autoridad y de decisión en todas sus instituciones. Cito el salmo XXI:
« Me rodea una manada de novillos, me acorralan toros de Basán; abren sus fauces contra mí como leones rapaces y rugientes. Soy como agua que se derrama y todos mis huesos están dislocados; mi corazón se ha vuelto como cera y se derrite en mi interior; mi garganta está seca como una teja y la lengua se me pega al paladar. Me rodea una jauría de perros, me asalta una banda de malhechores; taladran mis manos y mis pies y me hunden en el polvo de la muerte. Puedo contar todos mis huesos » (Ps. XXI, 14-18).
Este pasaje de la Escritura se aplica en primer lugar a la Pasión de Nuestro Señor, es decir, a su cuerpo físico. Pero se aplica igualmente, en un sentido espiritual, a la Pasión de la Iglesia, Cuerpo Místico de Cristo. El concilium malignantium -en la Vulgata-, « la asamblea de los malvados », se refiere, primeramente, al Sanhedrín que condenó a muerte a Nuestro Señor y, en segundo lugar, al CVII -XXI concilio ecuménico- que decretó la crucifixión de la Iglesia, la cual vive actualmente su pasión. Ella debe seguir los pasos de su Esposo en la Pasión, para luego seguirlo también en la Resurrección y en la Gloria. En efecto, del mismo modo que el cuerpo físico de Cristo murió y resucitó, su cuerpo místico conocerá una muerte mística y luego resucitará, con ocasión de la Parusía del Señor. No puedo evitar ver una concordancia numérica muy sugestiva, la del XXI: la pasión de la Iglesia es anunciada por el salmo 21, fue iniciada por el 21er concilio ecuménico y todo parece indicar que será consumada durante el siglo 21…
Escuché que se estaría trabajando en una universidad de Paría, sobre el asunto de encontrar los medios teológicos y legales para la destitución del papa Francisco. Supuestamente estaría conformada por abogados y teólogos destacados, con la colaboración de algún o algunos obispos y cardenales. Esta reunión se llevaría a cabo los días 30 y 31 de marzo del presente. ¿Alguien podría comentar al respecto?, ¿será cierto? Si la noticia es cierta sería formidable que el asunto se tome en serio.
ResponderBorrarSolamente la noticia http://adelantelafe.com/conferencia-paris-discutir-la-deposicion-papa-hereje/.
BorrarAunque no lleguen a nada, ya es un testimonio el que se está dando.