En
una noticia recientemente aparecida en el portal Infocatólica,
se nos informa sobre un mural “homoerótico” en la catedral de
Teri-Naria-Amelia, en ese momento a cargo del obispo Vicenzo Paglia, quién
encargó la obra blasfema y pornográfica según sus expresas indicaciones como lo
señala el mismo y homosexual autor de dicha a "bazofia de arte".
Recomendamos
escuchar las palabras del "artista" para despejar cualquier duda al
respecto.
Pero
¿quién es Paglia y a quién responde?
El
portal antes mencionado nos recuerda como el arzobispo Paglia realizó un
panegírico del político abortista y promotor de la sodomía, Marco Panelli, a
quien alabó por defender “la dignidad de todos y cada uno, especialmente
los marginados”, entiendase, los que se sienten orgullosos de sus vicios
nefandos.
El designado como Presidente para el Pontificio Consejo para la Familia por Benedicto XVI, Vicenzo Paglia, decía en
el 2013 al ser consultado sobre el derecho al matrimonio gay: “El matrimonio es una
dimensión clara del derecho. Están también las otras convivencias no
familiares, que son múltiples. En esta perspectiva, me parece, ayudará
encontrar soluciones desde una perspectiva patrimonial. Yo creo que esto es un
terreno que la política debe comenzar a recorrer tranquilamente”,
agregando luego “En mi
opinión, en el código actual, civil y patrimonial, podemos encontrar
soluciones que tengan en cuenta, ya a nivel patrimonial o a nivel de la
facilitación de la vida, impedir la injusticia sobre los más débiles. Esta es
una vía que, por lo poco que yo sé, me
parece importante recorrer”. O sea, No al matrimonio homosexual, pero
Sí al reconocimiento legal de los derechos de las uniones homosexuales (Panoramacatólico.info
citando a Radio
Vaticana). Se deduce entonces que se debe proteger jurídicamente a las
relaciones resultantes de la práctica de uno de los pecados más graves, siempre
y cuando no se les llame “matrimonio”. Recordemos que ésta siempre
fue la postura de Jorge Mario Bergoglio como bien lo documentaba Sandro
Magister (Infovaticana).
También
dijo Paglia: “En varios países, la homosexualidad es considerada un delito.
Hay que combatir esto”.
Presidiendo
en Filadelfia en 2015 el denominado “Encuentro Mundial de las Familas” (y no de
LA FAMILIA, como corresponde a la noción católica de la misma), Mons. Paglia al
ser consultado sobre la presencia de parejas homosexuales en dicho encuentro
dijo: “Todos
son bienvenidos, nadie está excluído”. Si sumamos a esto que en su curriculum
el vescovo incluye el haber recibido
en 1999 la Medalla Gandhi de la Unesco, institución masónica por excelencia
dedicada a promover la promiscuidad, homosexualidad y hasta el aborto a través de
la educación en el mundo entero, las cosas se empiezan a poner más claras.
Pero
para entender un poco más el contexto en el que tenemos que analizar la
actuación del monseñor, hay que recordar que es uno de los iniciadores de la
Comunidad San Egidio, uno de los principales grupos posconciliares promotores
del sincretismo religioso y también de la agenda
islamizante de Europa por medio de la inmigración ilegal de los refugiados
seguidores de Mahoma, en colaboración con la Federación de Iglesias Evangélicas
de Italia y la Iglesia Valdense (aquí).
El
fundador de la Comunidad Sant. Egidio que llevó a Paglia a presidir el Pontificio
Consejo para la Familia, es nada menos que Andrea Riccardi, promotor del
ecumenismo entendido con lógica posconciliar, y estrechamente vinculado con la
Alta Masonería mundial. Fue precisamente Riccardi quien promovió a Mario Monti
para su puesto como Primer Ministro de Italia, por lo que fue recompensado con
el puesto de Ministro de Cooperación e Integración Internacional. Mario Monti es
miembro del Masónico grupo Bilderberg, y fue presidente de la masónica Comisión
Trilateral Europea fundada por Rockefeller. También estuvo en cargos directivos
de la banca judía globalista Goldman Sachs en Europa en momentos en que fueron
responsables de la crisis del 2008.
Riccardi
con sus amigos, el masón Monti, y el comunista Prodi
Riccardi
al igual que Paglia fue premiado por la masónica UNESCO con su premio novel de
la paz, “casualmente” en 1999 al igual que il monsignore. También fue Riccardi
condecorado con el título de Comendador de la “Legión de Honor”, orden
establecida por Napoleón Bonaparte; otorgada dicha distinción y cargo por el
gran maestre Francois Hollande, miembro activo de la Masonería.
Riccardi
es uno de los fan number one de Bergoglio y como buen globalista considera a
Jorge Mario como “el
primer Papa de la Globalización”.Como cereza para la torta el logo de la defensora de los derechos homosexuales, Comunità di Sant’Egidio, es una palomita con un arcoíris detrás.
Hace
poco, el salido del closet Mons. Krzysztof Charamsa, ex miembro de la
Congregación para la Doctrina de la Fe, decía que en el Vaticano el 50% de los
sacerdotes eran “gays”
y hasta sostuvo que todos
conocían sobre la homosexualidad de Pablo VI. Ante las palabras del
resentido sodomita y los hechos pasados y recientes, por lo menos cabe el plantearse
una duda razonable sobre lo que pasa en el Vaticano.
No
hace falta mucho esfuerzo para entender los vínculos masónicos del Vaticano, no
sólo en éste caso, sino en muchísimos otros que documentamos en NCSJB.
En
definitiva, al darnos cuenta de la descomunal perversión eclesial en la más alta
jerarquía, lejos de desanimarnos, ésta situación nos debe llevar a pensar que no puede
faltar mucho para que esto termine. La promesa sobre que las puertas del
Infierno no prevalecerán sobre la Iglesia reaviva la esperanza del pronto final
de ésta innegable y generalizada apostasía. Seguimos en consecuencia rezando
para que se acorten los tiempos y sabemos que así será, porque como las
escrituras lo predijeron, de no ser así, ni los elegidos se salvarían.
Augusto
Recomendamos
el artículo de Sandro Magister “Entre
Roma y Dakar, el maquiavelismo de San Egidio”
Nacionalismo Católico San Juan Bautista
Cojonudo mandamás berGOGliano del Instituto Pontificio de la familia y el matrimonio.... a disfrutarlo en Valencia masonil UCV de Avellanas profes relig ARZOBISPAL. the end .
ResponderBorrarGracias Don Augusto, que disfruten estas sátrapas los honores que brinda el mundo, puestos reconocidos, etc., ya que poco les falta para rendir cuentas al Creador, y es entonces donde deberán pagar por todas sus perversiones y por el innumerable número de almas que arrastran al infierno. Pobres hombres esclavos de Satanás. ¿Cuánta inmundicia no existirá aún por descubrirse? Que Dios Nuestro Señor nos ampare en este mundo y nos libre de seguir semejantes monstruos incrustados dentro de la más alta jerarquía eclesial.
ResponderBorrar¿Viva Cristo Rey!
ABOMINACIÓN AL MAS ALTO GRADO
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