Hace
ya largo tiempo, en el bastión de la Verdad que encarnó la Revista “Cabildo”,
recordamos con unción el 75 aniversario de
En
días presentes estamos conmemorando los 75 años del final la última Cruzada Anticomunista,
desarrollada con la heroicidad de la que puede ser capaz, nuestra Civilización Greco
Romana Germánica y Católica (1941-1945). Estas dos fechas, marcan el comienzo y
el final de la gigantesca batalla con un frente de miles quilómetros, tal como
nos lo dice una simple ojeada en el mapa observando la posición del Lago Ladoga
en el norte, soviético pasando la línea hacia el sur por Moscú, Kursk hasta Rostov,
en el Mar de Azov, del extremo austral.
La
situación estaba preparada. Los peones del supercapitalismo, harían lo
indecible para salvar a la Unión Soviética, para luego pasar al ataque contra
el Eje antiliberal y antimarxista. Todo se preparaba desde la década de los
treinta. Vaya un dato claro. El general inglés Fuller, en su magnífica
obra “Batallas decisivas…” Editora Caralt tomo III página 419 nos informa: “Churchill,
en 1936 le expresó al general americano Robert Wood que era necesario aplastar
a Alemania porque estaba creciendo demasiado” Ya Premier, WINSTON CHURCHILL decía
en 1941: “Si Hitler invadiera el Infierno, yo estaría al lado del mismo
demonio”. De esto concluimos que, en la mente de aquel sujeto, anidaba un
oscuro ateísmo demoníaco porque sólo quien no acepta a Dios, puede afirmar el
horror de favorecer el mal absoluto.
El
cometido acariciado por aquella mente era posible en esos meses, ya que la ley
norteamericana llamada de “Préstamos y Arriendos” del 11 de marzo de 1941, daba
al presidente Roosevelt poderes para “obrar a su placer sin
interferencias de ninguna otra disposición” Lisa y llanamente significaba que
podía hacer la guerra, declarada o sin declarar en cualquier parte del mundo. Roosevelt
se precipitaba ciegamente en el camino de la guerra universal, resentido
minusválido llegado al poder en 1933 con el apoyo de logias masónicas y mafias
delictivas, simpatizante secreto de los comunistas iba a terminar sus días en
1945 entregando, junto a su cómplice Winston Churchill, en la reunión de Yalta,
(febrero de 1945) la mitad del mundo a STALIN.
Pero
sigamos la línea de los sucesos históricos dejando de lado, por un momento, a
los criminales de guerra, en la consumación uno de sus brutales designios. Cuando
Hitler, después de rechazar las exigencias del soviético Molotov, en noviembre
de 1940, tuvo la seguridad que Stalin con sus 240 divisiones mecanizadas y 10.000
aviones se preparaba para entrar en campo. Por ello ordenó poner en acción la
“Operación Barbarroja”, preparada con croatas, fineses, rumanos y eslovacos
alemanes e italianos. Había que golpear primero y fuerte al judas bolchevique.
Eran
las 3 y 45 del 22 de junio de 1941. Los alemanes lanzaron un vigoroso ataque en
un frente de
En
el plano de la traición, la red de espionaje comunista en Japón, montada y dirigida
por el “alemán” Richard Sorge y con presencia secreta en el mismo Consejo
Privado del Emperador Hiroito, había informado que los nipones no atacarían el
Asia soviética y se produciría un ataque del “Sol Naciente” a Pearl Harbor.
Stalin
(nuevo Gengis Khan) inmediatamente retiró semisalvajes mogoles que guarnecían
las tierras lindantes con las zonas japonesas, para enviarlos al frente europeo
y frenar así la embestida victoriosa del Reich y sus aliados. En tanto Delano
Roosevelt con su Secretario de “Defensa” el Gral. Marshall, (futuro Premio
Nobel de
El
silencio de Roosevelt y Marshall fue absoluto, porque el pretexto para entrar
en la guerra estaría dado a la brevedad (7 de diciembre de 1941) La propaganda
directa y subliminal de los poderes que manejan las democracias totalitarias y
plutocráticas se encargaría de sembrar el odio en el universo con el “Remember
Pearl Harbor”. Los EEUU con unos viejos acorazados hundidos y algunos miles de
marinos muertos, estaban “moralmente justificados” para ser beligerantes y
apoyar la tiranía terrorista de
En
Europa, se extendía el entusiasmo por la Cruzada, para participar en la lucha
contra la tiranía lenino-stalinista. Todos se aprestaron a la Guerra Justa.
Ni una Nación falló. Cada una, envió voluntarios. Eslovacos, Franceses,
Españoles, Noruegos, Flamencos, Valones, Daneses, Holandeses, Ucranianos, Bielorusos,
Serbios, Armenios y hasta Árabes seguidores del Gran Mufti de Jerusalén. Asimismo,
lo hicieron las Naciones directamente beligerantes como Italia, Croacia,
Hungría, Rumania, etc.
La
línea del frente se alargó a
En
nuestra estadía en Madrid, durante diciembre del 2011, tuvimos ocasión de
acceder a una seria Revisión Histórica referente a estos Héroes calumniados
como traidores por la internacional siniestra y las plutocracias decadentes.
El
Profesor Carlos Caballero Jurado con su pasión por
He
aquí párrafos de páginas destacables de la obra: “La noticia del ataque alemán
a Rusia desencadenó en Francia una intensa emoción...
Atacando,
y es un ejemplo, con la columna Francesa del Coronel Labourdette al aeropuerto
de Tempelhoff en Berlín, para recuperarlo de los stalinistas. Mientras tanto,
junto a españoles Falangistas (división “Fantasma”) defendían el Bunker
del Führer en lucha sin igual despiadada y sin cuartel” Algunos miles contra las
hordas de la Estrella Roja, armadas hasta los dientes disparando con 8000
cañones sobre la capital del Reich. En estos libros del Profesor Caballero, está
la historia para que las generaciones futuras admiren a unos hombres que, al
volver a su patria, los que pudieron hacerlo, fueron tachados de traidores... Las
páginas 331,332 y 333 del tercer tomo son de antología…Allí se desarrolla la Verdad.
Impacta
esta frase contundente: “Francia había decidido inventarse de arriba abajo su
historia de la Segunda Guerra y los antiguos Voluntarios no iban a aguarle la
fiesta...” De golpe y porrazo se hizo una amnesia colectiva. Se olvidó que el
Ejército heredado por Francia del Frente Popular judeo marxista, se había
rendido a un costo ridículo para el Ejército alemán. Se olvidaron más de 1000
muertos causados por los Británicos atacando a sus todavía aliados en la
base naval de Mers el Kebir.
Al
“río de las sombras”, fue la felonía inglesa de Dunkerque desde donde
trasladaron a Inglaterra 250.000 de sus soldados rodeados por los germanos,
rechazando con golpes de bayonetas, a sus aliados franceses que querían subir a
las lanchas. Albión, dejó en el continente sólo una división organizada. Todo
el episodio, fue una catástrofe para Francia (26 de mayo 3 de junio de 1940). La
rendición del Paris masónico era inevitable.
(17
de junio de 1940) “Se olvidaron las 600.000 Toneladas de bombas que los Angloamericanos
lanzaron sobre Francia entre 1943 y 1944, causando decenas y decenas de
miles de muertos. Nadie quiso darse por enterado que el trato cotidiano entre
alemanes y franceses era singular como para que, en 1943, la autoridad militar Germana
estuviera pasando pensiones a 80.000 mujeres que tenían hijos con
soldados del Reich”.
“El
gran mistificador fue sin duda el general De Gaulle que se
presentó a sí mismo como encarnación de Francia”. Nada se ha dicho, ni se dice
sobre las serias sospechas existentes respecto de su intervención, en el
asesinato del Almirante Darlan (diciembre 24 de 1942).
Pero
De Gaulle, el petulante locutor de la radio de Londres, hacia
donde huyó luego de derrotada Francia en 1940, no estaba solo. Para inventar
orwellianamente una nueva historia, tenía a su lado, entre otros, a Andrë
Malraux. Con referencia al personaje citado, el profesor Caballero
Jurado escribe: “Vale la pena detenerse en su figura sobre todo después que
Oliver Todd publicara en el 2001 su biografía: “André Malraux, une vie”
(editada por Gallimard Paris. Libro que se publicó en castellano en el 2002). Una
obra imprescindible para quien desee comprender como Francia reescribió su
historia. Todd nos revela -continúa Caballero- que quien fue considerado un icono
del siglo XX debe ser visto como un aventurero mitómano…” Este párrafo
del Historiador Todd, explica la maniobra de quien había rechazado unirse a la
“Resistence” porque esta no contaba con tanques y aviones”, a ella se afilió en
la penúltima hora, dentro de filas comunistas. Sin embargo “pasó a la
posteridad como el intelectual comprometido y luchador”.
Caballero,
transcribe un párrafo de Todd que dice así: “Malraux se beneficia de la
colusión gaullista comunista justo recién acabada la guerra. El general necesitaba
repetir que Paris se había liberado sola, que el pueblo francés había
luchado heroicamente y los comunistas alimentar el mito que eran
el partido de los 70.000 fusilados…” “Malraux acabó enterrado en el
Panteón pero sus libros siguen trasmitiendo la ficción. Pero cuando la
ficción trata de hechos históricos reales –continúa Caballero– ya no es sólo
ficción, es mentira”. “Francia aceptó las falsedades de un De Gaulle,
un Malraux, y tantos otros, porque deseaba creérselas.” (Destacados
nuestros) ¡Oh! poder de la semántica instrumentada para robotizados cerebros
democráticos. Dios nos guarde de ellos.
Los
molinos del Señor, Nuestro Dios, muelen lentamente, … pero muelen y
muestran la Verdad.
Por eso
rogamos, para que nos siga contando entre sus peones molineros.
Luis
Alfredo Andregnette Capurro
Desde
el Real de la Muy Fiel y Reconquistadora
Ciudad
de San Felipe y Santiago de Montevideo
Nacionalismo
Católico San Juan Bautista
.
https://www.youtube.com/watch?v=cOKnrtWQCaI
ResponderBorrarhistorias no contadas
La traición a occidente de los yankis no puede ser callada!!!
ResponderBorrarTraidores a occidente en beneficio de la barbarie bolchevique.
ResponderBorrar